No temas porque yo estoy contigo

Esta página ha sido diseñada para transmitir mensajes cristianos. El que Cambio Mi Vida, nace con la idea de poder llegar a otras personas que como yo un dia creyeron que no habia esperanza. Solo puedo decir que el Señor me ha enseñado a depender de El, a confiar en El y me ha preparado para servir en el ministerio como consejera, maestra, amiga y procuro servir de la mejor manera. Estoy muy agradecida por su amor y su perdón, por lo que hizo por mi, cuando ya nada tenía sentido. Estoy segura que para el Señor nada es imposible, rompe limites y para El no existen fronteras. Jesús te ama y por eso declaro que su fidelidad es grande y su amor eterno. Bienvenido y bienvenida a este blog y espero que sea de mucha bendición para tu vida.

lunes, 5 de diciembre de 2011

Diario Devocional

Den gracias al Señor, porque él es bueno; su gran amor perdura para siempre. (Sal. 118:1)

Es precioso cuando uno se despierta y lo primero en lo que piensa es en orar. Es delicioso levantarse aunque cuesta dejar el calor de la colcha, lo cómodo de la habitación, pero es más gratificante el tener un tiempo a solas con Dios.
Dar gracias es una acción, las primeras palabras al comenzar la oración es decir Padre, alegrarse porque está hablando con la máxima autoridad y poder deshacerse en palabras bonitas, es que uno ni se da cuenta del tiempo cuando está en el tiempo de la meditación. Luego abrir la Santa Palabra y comenzar a leer un pasaje como este del salmo 118, reconocer el gran amor de Dios que no es para un rato, es para siempre.
Al pueblo de Israel se le hizo cumplir esta declaración, proclamar “su gran amor perdura para siempre”. Puede usted en esta mañana y cada día de su vida hacer esta proclamación: “Su gran amor perdura para siempre”.
Que proclamen los que temen al Señor “su gran amor perdura para siempre”.
Desde mi angustia clamé al Señor y él respondió dándome libertad.
El Señor está conmigo, y no tengo miedo;
¿Qué me puede hacer un simple mortal?
El Señor está conmigo, él es mi ayuda;
Es mejor refugiarse en el Señor
Que confiar en el hombre.
Tus eres mi Dios, por eso te doy gracias;
Tus eres mi Dios, por eso te exalto.
Den gracias al Señor, porque él es bueno
Su gran amor perdura para siempre. (Sal. 118:2, 4,5,8,9,28,29).

Dios les siga bendiciendo en este día, permita que su presencia tome control de su vida y de su corazón, no olvide que todos los beneficios adquiridos no vienen del hombre sino de Dios.

No hay comentarios: