No temas porque yo estoy contigo

Esta página ha sido diseñada para transmitir mensajes cristianos. El que Cambio Mi Vida, nace con la idea de poder llegar a otras personas que como yo un dia creyeron que no habia esperanza. Solo puedo decir que el Señor me ha enseñado a depender de El, a confiar en El y me ha preparado para servir en el ministerio como consejera, maestra, amiga y procuro servir de la mejor manera. Estoy muy agradecida por su amor y su perdón, por lo que hizo por mi, cuando ya nada tenía sentido. Estoy segura que para el Señor nada es imposible, rompe limites y para El no existen fronteras. Jesús te ama y por eso declaro que su fidelidad es grande y su amor eterno. Bienvenido y bienvenida a este blog y espero que sea de mucha bendición para tu vida.

martes, 4 de octubre de 2011

Diario Devocional

Tenemos también la palabra profética mas segura, la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones. (I Pedro 1:19)

Que le dice este pasaje. Entiendo que habla por sí mismo. Se han escrito muchos libros en diferentes idiomas y posiblemente han sido un bestseller, pero la Biblia es la verdad, en ella encontramos respuestas, conocimiento y una variedad de consejos para todas las edades, aun para los que están todavía en el vientre de su madre.
A veces pienso que si antes de afirmar mis pasos en Jesús tal como ahora lo vivo, hubiera evitado una serie de errores, porque el principio de la sabiduría es el temor a Dios (Prov. 1:7). Si uno se equivoco se equivoco, pero lo importante es que cuando uno rectifica y se arrepiente Dios le perdona, luego hay que seguir adelante sin mirar atrás. Como dijo el apóstol Pablo hay un aguijón en la carne (2 Corintios 12:7) que uno la siente y lastima, pero bástate mi gracia, ha dicho el Señor, porque el poder se perfecciona en la debilidad.
Dios le bendiga en este día, medite y considere como andan sus pasos, si duda aun o no está seguro del paso siguiente deténgase y busque al Señor, que sin duda El estará por usted.

Si no ha aceptado a Cristo en su corazón, hágalo hoy.