DiarioDevocional

Jehová cumplirá su propósito en mi (Salmos 138:8).
Somos hechura de Dios, formados de sus manos, llamados para ser un pueblo que adore al único Dios verdadero. Un pueblo al que se le ha prometido una nueva vida, renovándose, dejando todo atrás en relación a la vieja naturaleza que es pecaminosa. A la gente no le gusta que le mencionen la palabra pecado, tildan a los cristianos de hablar todo el tiempo del pecado, pues a las personas les gusta escuchar lo que quieren escuchar menos lo que les exhorte a cambiar su manera de vivir.
Siendo que usted es hechura de Dios y si así lo declara porque un día quiere ir al cielo y ocupar un lugar en el reino eterno, y cree que por tener un Padre bueno le permitirá entrar en su casa aunque en su vida terrenal haya hecho cosas indebidas o vivir una vida de libertinaje, no crea que será merecedor de este galardón solo con pedirlo, es necesario reconocer que si cree en Dios con convicción y no por conveniencia, su vida tiene que cambiar porque Dios no puede ser burlado.
¿Cuáles son los propósitos de Dios para su vida? ¿Lo ha pensado alguna vez? Acepte las promesas de Dios que son verdaderas. Rinda su vida al que le dio la vida. No pase por este mundo ignorado, levante su mirada hacia las cosas que son eternas, sabe por qué, aquí la respuesta, porque en este mundo hemos de vivir lo más 80 años lucidos y una eternidad completa con el Señor, aunque le parezca broma de cómo se puede seguir viviendo después de la muerte. Hay un misterio, pero no nos toca discutirlo, simplemente creer.
- Te alabaré con todo mi corazón; (v.1),
- Me postraré hacia tu santo templo, y alabaré tu nombre por tu misericordia y tu fidelidad; v.2
- El día que clame me respondiste; me fortaleciste con vigor en mi alma (3)
- Porque Jehová es excelso, y atiende al humilde, más al altivo mira de lejos (6)
- Si anduviere yo en medio de la angustia, tú me vivificarás; contra la ira de mis enemigos extenderás tu mano, (7)
- Jehová cumplirá su propósito en mi; tu misericordia, oh Jehová, es para siempre; no desampares la obra de tus manos.(8)
Bástele saber que hay un Dios grande, si aun no lo ha recibido búsquelo de todo su corazón y crea que sus promesas son eternas. Piense en los propósitos de su vida y no desgaste el tiempo en banalidades, reciba a Cristo en su corazón, comience a vivir de nuevo, anímese y eleve su corazón al Dios del cielo diciéndole gracias, infinitas gracias. Su vida tiene propósito.